Evoca Cuba cardinal acción armada contra la tiranía batistiana

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Cuba evoca hoy el aniversario 66 del asalto al Palacio Presidencial, trascendental acción protagonizada por jóvenes cubanos para ajusticiar al dictador Fulgencio Batista, y que se acompañó de la toma de la emisora Radio Reloj, con el fin de convocar a la insurrección popular.

El primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel, resaltó en su perfil de Twitter que los caídos ese día serán siempre inspiración y ejemplo para la juventud de la nación.

“¡Si caemos, que nuestra sangre señale el camino de la libertad!, dejó escrito José Antonio aquel aciago, terrible, 13 de marzo de 1957. Los caídos ese día, serán siempre inspiración y ejemplo para la juventud de #Cuba”, escribió.

El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo, señaló que los hechos de ese 13 de marzo (aunque no lograron su objetivo) demuestran profundo heroísmo por parte del Directorio Revolucionario.

En un mensaje difundido hoy por el legislativo en Twitter, el dirigente señaló que el ejemplo y legado de José Antonio Echeverría y sus compañeros de dicha organización revolucionaria permanecen vigentes en la continuidad de la juventud cubana.

Roberto Morales Ojeda, secretario de organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, calificó de audaces las acciones ocurridas hace exactamente 66 años.

“Recordamos el heroísmo de los jóvenes que desafiaron a la dictadura batistiana, honraron a sus mártires y señalaron con su sangre el camino de la unidad y la victoria”, escribió el funcionario en la misma red social y agregó la etiqueta #CubaViveEnSuHistoria.

El 13 de marzo de 1957, poco antes de las 03:30 minutos de la tarde, dos autos y un camión con el rótulo Fast Delivery se detuvieron al unísono frente a una de las postas del entonces Palacio Presidencial, y sus tripulantes irrumpieron a fuego limpio en el interior del recinto.

Los jóvenes, integrantes del brazo armado de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), el Directorio Revolucionario, tenían el propósito de ajusticiar al dictador Fulgencio Batista y entregar las armas de la guarnición al pueblo, que debía ser convocado por la emisora Radio Reloj tras su ocupación por otro grupo liderado por José Antonio Echeverría.

Sin embargo, Batista logró huir, y los asaltantes a Palacio no recibieron el refuerzo programado, lo que facilitó al regimiento presidencial dominar la situación y provocar la retirada de los asaltantes.

En Radio Reloj, Echeverría informó del ajusticiamiento de Batista y denunció los desmanes cometidos por el régimen, antes de que la emisora saliera del aire.

Minutos después, al lado de los muros de su querida Universidad de La Habana, se enfrentó a los sicarios y fue vilmente asesinado.

(Con información de ACN)

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